Idea Central:
El Espíritu Santo te hace libre de toda atadura, porque donde está el Espíritu de Dios allí hay libertad.
Introducción:
Bundy fue un famoso asesino condenado por violar y matar a un sinnúmero de niños en los Estados Unidos a finales de la década de los 80’s Provenía de un hogar cristiano y sólido. Sin embargo, desde niño comenzó a interesarse por material pornográfico. Poco a poco desarrolló una adicción a la pornografía cada vez más explícita y agresiva. En su mente adulta, la sexualidad quedó atada a la violencia. En 1989 fue ejecutado en el Estado de la Florida por el asesinato de una niña de 12 años. Como él muchos viven atados y esclavizados aunque no sea precisamente en una cárcel con barrotes.
1.
Proverbios 28:13 Uno de los mayores temores que puede existir cuando pecamos contra Dios es no sentirnos dignos de estar en su presencia. Pero cuando confiesas tu pecado alcanzas misericordia. Sólo Él puede juzgarte, perdonarte y limpiarte. La paga del pecado es la muerte y Dios puede borrar nuestros pecados por su inmensa misericordia. Sin embargo, muchos prefieren ocultarlo por vergüenza, temor al rechazo o incluso orgullo, pero nada de esto puede traer libertad a tu vida.
2.
Santiago 5:16 Debemos confesar nuestras ofensas unos a otros. Haciéndolo, tu pecado pierde su condición de oculto y podrás recibir ayuda. Confía en personas que puedan aconsejarte. Tus pastores o tus líderes son las personas ideales pues tratarán con tu problema como lo haría Dios.
3.
Mateo 6:14 Luego de cometer un pecado puede agobiarte un sentimiento de culpa o remordimiento. Jesús nos enseño que debemos perdonar las ofensas de otros, además debes perdonarte a ti mismo por haberle fallado a Dios.
4.
Miqueas 7:18-19 Dios es padre amoroso que no refiere para siempre su enojo, porque se deleita en misericordia. Si Dios se olvida del pecado que cometiste, tú también debes hacerlo. Sigue adelante, deja atrás todo sentimiento de culpa. Recuerda que Jesús no culpó a la mujer sorprendida en adulterio. De la misma forma te perdona y dice. “vete y no peques más”.
Llamado:
Dios quiere darte una nueva vida, libre de las ataduras del sexo. Desea que goces de la Santidad y Pureza, con la conciencia tranquila y el cuerpo dedicado a Él. Si deseas esa libertad debes arrepentirte y confesar el pecado. Pídele que te libere de la culpa para poder perdonarte a ti mismo. Y por último, ya con el perdón, huye de todo aquello que te induce a pecar. Renuncia a la tentación y vive tranquilo con la libertad que Dios te da.
Puedes Ser Libre - Noviembre - Lo Mejor de Sexo par tu vida
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